Mi misión es matar el tiempo, y la del tiempo es matarme en su turno a mí, Qué cómodo se encuentra uno entre asesinos. - E.M.C. -
Ahora me doy cuenta que mi teléfono sin tu teléfono no sirve para nada.
Se siente como aparatito incompleto, como si no hay vasito en la otra punta de la cuerda.
Solo un reloj.